Se te acercan como un amigo y ofrecen “ayudarte” con “algo para olvidar”. La droga te “ayudará a integrarte” o “a ser popular”.
Los traficantes, motivados por las ganancias que obtienen, dirán cualquier cosa para que compres sus drogas. Ellos te dirán que “la cocaína hará de tu vida una fiesta”.
A ellos no les importa si las drogas arruinan tu vida mientras sigan cobrando. Lo único que les importa es el dinero. Antiguos traficantes han admitido que veían a sus compradores como “peones en un juego de ajedrez”.
Conoce la realidad acerca de las drogas. Toma tus propias decisiones.
“Con la coca, eres como una palomilla atrapada en una lámpara. Te atrae más y más y no te puedes detener. No es algo físico. Está dentro de tu cabeza. Mientras más tienes, más consumes. Yo me he inyectado a mí misma cada diez minutos. Pedí un préstamo en el banco para comprarla. Un día me quedé sin trabajo. Esto era peor. Solía inyectarme todo el tiempo. Esta cosa me volvió loca. Yo lo sabía, pero continué. Me volví un fracaso total”. — Marilyn