UN MUNDO SIN DROGAS DESACTIVA EL DESASTRE
Un equipo poderoso en Europa Central trabaja para desactivar lo que se ha llamado “una bomba de relojería” de consumo de drogas antes de que comience.
Hungría, un lugar de belleza natural, de innovación científica y de grandeza europea clásica; es también un país donde uno de cada tres adolescentes entre los 13 y los 16 años ya han probado las drogas ilegales. Para complicar las cosas, el país está recientemente experimentando un aumento en el consumo de drogas sintéticas y las muertes que lo acompañan, motivando a un periodista a ponerlo de esta manera: “Hungría está sentada en una bomba de relojería que amenaza con hacer añicos la sociedad”.
El gobierno húngaro ha respondido con leyes severas tanto para los traficantes como para los consumidores. La posesión de una pequeña cantidad de una sustancia controlada puede ahora llevar a un húngaro a prisión durante dos años.
Pero parar esta epidemia va a llevar más que penas estrictas. El ciclo del consumo de drogas debe ser detenido al inicio llegando a los jóvenes con La Verdad sobre las Drogas antes de que los traficantes los enganchen con charlatanería.
Un Mundo sin Drogas de Hungría, una sección de la iniciativa internacional de la educación y prevención de La Fundación por un Mundo sin Drogas, se ha dedicado a esta causa. Con materiales impactantes y galardonados dirigidos a los jóvenes y dándoles los hechos crudos y duros sobre cada una de las drogas, el programa ha explotado en Hungría.
“Hungría está sentada en una bomba de relojería que amenaza con hacer añicos la sociedad”.
Durante los últimos 14 años, Un Mundo sin Drogas en Hungría ha organizado anualmente maratones de primavera, corriendo de ciudad en ciudad y reuniéndose con funcionarios, organizando eventos, visitando escuelas y distribuyendo miles de folletos de La Verdad sobre las Drogas, difundiendo el mensaje de llevar una vida sin drogas por todo el país.
El año pasado más de 4000 nuevos corredores acompañaron a los atletas de Un Mundo Sin Drogas. Juntos, recorrieron 2100 km atravesando 77 ciudades y dando seminarios antidrogas a más de 7930 niños.
Y para el resto del año, Un Mundo sin Drogas de Hungría ha establecido una red creciente de 1300 tiendas en todas las regiones del país que distribuyen los folletos de La Verdad sobre las Drogas a diario a sus clientes. Las tiendas participantes abarcan desde la pizza a domicilio que incluye un folleto con cada pedido, a las farmacias que distribuyen los folletos de La Verdad sobre los Analgésicos con cada receta.
Un Mundo sin Drogas de Hungría se dirigió después a la multimedia, con sus anuncios de servicio público galardonados emitiéndose ahora en 18 de las más grandes cadenas de televisión en 9 regiones de Hungría.
Los impactantes anuncios de servicio público, uno para cada droga de elección, muestran lo que se le había dicho a una persona joven acerca de la droga frente a lo que en realidad sucedió cuando la tomó, que sigue la pauta de modelo: “Dijeron... Ellos Mintieron”.
El Campo de Deportes László Papp de Budapest con 12 500 asientos se embarcó en el mensaje de sin drogas, emitiendo los anuncios de servicio público durante 23 conciertos con actuaciones de artistas tales como Britney Spears y Sade.
Para coronarlo, los anuncios de servicio público se emiten en los principales cruces de tráfico en Budapest y en 150 oficinas de correos de la nación. A través de estas emisiones, Un Mundo sin Drogas en Hungría ha llegado a más de 135 millones de personas en los últimos cinco años.
El equipo de un Mundo sin Drogas de Hungría, que ahora recibe fondos del Ministerio de Recursos Humanos Húngaro, ha distribuido casi medio millón de folletos y ha llegado a más de 51 000 jóvenes en 100 escuelas solo en los últimos tres años. Al hacerlo, el equipo está despertando a una nación al estrago devastador del consumo de drogas y poniendo fin al ciclo antes de que comience.
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